Parece que Dios ya estaba acabando de crear el universo,
pero todavÃa le quedaban un par de cosas por repartir,
asà que decidió hablar con Adán y Eva.
Les dijo que una de las cosas que aún le quedaban
era algo que permitirÃa, a quien lo tuviera, hacer pipà estando de pie.
"Realmente es algo muy útil", les dijo Dios,
"y estaba pensando si les interesarÃa a alguno de ustedes".
Dios y Eva lo estuvieron mirando un rato,
y entonces Dios le dijo a Eva,
"Bien, aquà tienes la otra cosa que tengo para repartir,
y que creo que te pertenece.
"¿Y cómo se llama?", preguntó Eva.